
Detesto las listas. Ordenar da la falsa sensación de hacer. Decir da la falsa sensación de ser. Si las listas sirven para algo, es solo para eso, decir ordenadamente. A otro. Decirle algo a otro ordenadamente. Compartir. Son fundamentales las listas, ¿no?
¿Cómo es la gente del bien?
- La gente del bien se quiere a sí misma, pero no cree que es el centro del universo.
- La gente del bien valoriza la presencia, pero no se lamenta por la ausencia.
- La gente del bien puede dudar de lo que sabe, pero está segura de lo que no sabe.
- La gente del bien reconoce lo importante, pero no conoce la urgencia.